El papel pintado es una decoración de gran formato que, por lo general, se realiza sobre un soporte de papel, de vinilo o de tejido no tejido (TNT), y se utiliza para revestir las paredes de una habitación. Se trata de un elemento con un alto impacto decorativo, capaz de adaptarse a todos los tipos de ambiente y estilo. Además, es muy versátil y permite revestir una estancia completa o solo algunas paredes. Decorar con el papel pintado significa dar estilo y personalidad a cualquier espacio, evocar emociones y dar a la casa un toque de originalidad. Estamos ante una solución idónea incluso para techos y suelos y que, gracias a su alta resistencia, se puede colocar en cualquier estancia de la casa, desde la cocina o el baño, hasta el salón o el dormitorio.
Las características y modos de colocación de los papeles pintados cambian en función del tipo que se va a utilizar. Los papeles pintados tradicionales son de celulosa pura y tienen colores más vivos y profundos. En cambio, son más delicados al lavado y necesitan de una mano de obra experta para su colocación. Se caracterizan por un peso y espesor diferente y pueden tener una superficie lisa, áspera o brillante. Por su parte, los papeles pintados vinílicos se imprimen sobre soportes de origen plástico. Son fáciles de colocar con cola en la pared, y de lavar y quitar. Además, son ideales para decoraciones con dibujos modernos en tonos fríos. El papel pintado vinílico se realiza en dos capas: una de soporte y una superficial que conserva el estampado que decorará la pared. En los modelos más económicos, la capa de soporte es de papel, mientras que en los más costosos es de tejido no tejido. Encima de la capa de soporte se coloca el revestimiento que se realiza con material plástico (vinilo). Pueden obtenerse superficies lisas, a relieve o, incluso, con efecto 3D. Por último, los papeles pintados de TNT unen las ventajas de los dos tipos anteriores, tienen colores vivos y dibujos bien definidos, y la colocación es relativamente fácil para un tapicero profesional. Este tipo de papel pintado es también más fácil de quitar, ya que no deja residuos.
La amplia gama de estampados y dibujos de los papeles pintados hace que puedan satisfacer cualquier necesidad de estilo. Entre los más codiciados tenemos el papel pintado moderno, caracterizado por un diseño contemporáneo, y el papel pintado geométrico o abstracto. En cambio, si se quiere dar un toque de elegancia y vivacidad, el más indicado será el papel pintado de diseño con su alta calidad en cuanto a estilo, impresión y soporte. Pero el papel pintado no va solo de diseños modernos, sino que incluye también el estilo tradicional, a menudo, simplificado y reinterpretado. No olvidemos que el papel pintado tradicional es aún actual y sigue la línea de nuestra arquitectura histórica. Y no se trata solo de castillos y edificios antiguos, sino también de pisos en el centro de la ciudad o de una hermosa casa rural. Por su lado, el papel pintado estilo country abarca desde el estilo inglés hasta el provenzal, con representaciones de vida rural. Existen también los papeles pintados de flores. En este caso, los dibujos van desde el jardín en flor hasta la jungla tropical, y sus representaciones gráficas pueden ser tan realísticas como estilizadas, o incluso interpretaciones geométricas con colores vivos, ideales para dar un toque «verde» a los pisos más urbanos.
Y es que, desde las flores hasta el mar, sin dejar de mencionar el arte pop, los estampados de los papeles pintados son infinitos. Por ejemplo, el atemporal papel pintado a rayas es el mejor aliado para valorizar cualquier ambiente. Las rayas pueden ser finas, anchas, dibujadas a mano con pequeñas irregularidades, con colores vivos o tenues.
Otro tipo muy utilizado es, sin duda, el papel pintado estilo oriental. Se trata de revestimientos que se inspiran en la fusión de culturas que es hoy nuestra sociedad global: dibujos orientales con colores más actuales, paisajes chinos estilizados con un toque más contemporáneo.
Por último, en un dormitorio infantil no puede faltar un papel pintado para niños, con tonos que van del rosa al celeste o con dibujos coloridos y alegres.
En función de las medidas y de la pared que se quiera decorar, es posible elegir entre varios tipos de papel pintado. Actualmente, marcan tendencia los papeles pintados panorámicos. Se trata de un revestimiento formado por rollos con medidas estándar que, cuando se unen entre sí, crean un dibujo o una decoración de gran tamaño. Con este tipo de aplicación es posible crear reproducciones de paisajes o imágenes de gran formato.
Y si queremos darle un uso original al papel pintado, podemos colocar a lo largo de una pared una sola tira, o incluso crear un borde de papel alrededor de la pared, para enmarcarla como si se tratase de un cuadro. Hoy en día, las aplicaciones son infinitas.