GLOVE By Lapalma
Taburete de tela regulable en altura con reposapiés
2022
S471
Es suave como el guante GLOVE, el nuevo taburete de Lapalma diseñado por Francesco Rota, que incluido en la importante colección de asientos altos de la marca —hasta 16 modelos, desde el emblemático LEM de Shin&Tomoko Azumi (2000) hasta el más reciente AARON de PIO&TITOTOSO (2020)— investiga un nuevo tipo de producto no desarrollado nunca hasta ahora por la empresa. El proyecto, agradablemente armónico en su diseño, apunta hacia la ergonomía y la máxima comodidad. Y a un aspecto decididamente textil.
Marcado por un respaldo alto, que soporta y sostiene la parte posterior, y por un cómodo acolchado que envuelve todo el asiento, GLOVE acoge, y casi parece que calce, a la persona que se sienta. La suavidad de las líneas prosigue en la base del taburete, propuesta, por ejemplo, en una variante con corredera con barra de metal inédita, que presenta una amplia curvatura tanto bajo la placa del gancho con el asiento como en las dos partes bajas donde acaba la corredera. El reposapiés, parecido a una barra de papel, cruza las patas de la corredera en una solución de discontinuidad. Una marca gráfica que regala al modelo un atractivo más contemporáneo.
El bastidor de poliuretano rígido que se combina en la parte más exterior con un poliuretano de espuma permite una ágil eliminación del producto al final de su vida, confirmando la atención reservada por Lapalma al tema de la sostenibilidad. Y jugando con los contrastes de material y de color o incluso con los elegantes tono sobre tono en el revestimiento de asiento y respaldo, se pueden obtener resultados cada vez diferentes y con una fuerte personalidad.
Gracias a las numerosas bases disponibles, GLOVE se hace sistémico, respondiendo a las más diversas exigencias en el ámbito doméstico y contract. Propuesto, además de en la variante con corredera antes descrita, también con base de disco, con cuatro patas, con altura regulable. Con GLOVE el trabajo alto en la oficina es cómodo, también durante periodos de tiempo prolongados. Y quién sabe si sentados en un restaurante, para alargar lo agradable de su suave abrazo, acabemos pidiendo también un postre.